Y ahora pienso, ¿que he estado haciendo todo este tiempo? ¿En que he malgastado mi vida? He luchado y he dado todo lo que tenía por algo que nunca existió. He estado en los buenos momentos, y en los malos. He secado lagrimas, y he evitado que algunas se llegaran a derramar. He dado mi mano cuando era necesaria, y he escuchado mil problemas sin pedir nada a cambio. ¿Donde estaba el problema? No creo que lo hiciera tan mal, no creo que merezca esto. Traicionaste mi confianza, me hiciste sufrir, fuiste directa a mi punto débil, a donde me dolería, a donde sabías que me harías daño. Y aun después de todos estos años, no tuviste valor de reconocerlo, lo negaste todo cuando te pedí la verdad. Empiezo a pensar que quizá no debí haberte evitado tantas lagrimas, porque todas y cada una de ellas las he acabado derramando yo por ti. No insistas más, que no quiero tus disculpas. Si te he sacado por completo de mi vida es porque todos y cada unos de los "para sie