Entradas

Mostrando entradas de diciembre, 2011

prohibido

Imagen
Ese "no debería", esa sensación de saber que está mal... es lo que más me gusta de todo esto.

Nunca utilizo la palabra amor a la ligera.

Hoy he soñado contigo. Si, contigo. Soñé que me traías el desayuno a la cama tras una larga noche juntos. Que me besabas, y que bajo las sábanas podía notar tus suaves caricias. Que en el suelo estaban mis medias rotas, y en mi cuello las marcas de nuestra pasión. Que me mirabas y tus ojos decían quiero más, que me comías con la mirada y que yo me derretía como si de un hielo se tratase.  Y mientras yo te hablaba de todos y cada uno de los momentos que nos quedaban por vivir tu ibas recorriendo mi espalda con tus labios. Y me abrazabas, y me volvías a besar.  Desperté de ese sueño, y volví a esta horrible pesadilla.

me gustaba caminar cogidos de la mano

Todas  buscáis  el verdadero amor, esa persona con la que todo sea perfecto, con la que no  necesitéis  más.  Yo lo había encontrado. Ese del que no me podía despedir sin un beso, es más, me costaba despedirme. Ese con el que podía pasar mil horas hablando que para mi nunca era suficiente.  Ese que sabía volverme loca con solo mirarme.   Del que  conocía  todo, su punto  débil , su plan perfecto, su numero y color preferido... Ese del que conozco cada milímetro de su piel. Ese que tanto me gustaba... cuando se ríe, cuando se enfada y arruga la frente, cuando se pone serio, cuando habla, cuando calla.   También  me gustaba  cuando le miraba y no se daba cuenta,  cuando me miraba y pensaba que no me daba cuenta.  Me gustaba la calidez de tu piel contra el frío de mis manos en invierno. No olvides quien eres. Porque ese alguien es al que yo quiero cada día.

paréntesis

Que lo más probable es que él nunca llegue a leer esto, o quizá si, no lo se.. Lo que si se es que hoy le necesito. Abrazándome. Respirando el olor de su ropa. Escuchándole decir que no pasa nada, que él va a estar ahí  siempre .  Y sus  abrazos, y sus caricias... Rozando cada poro de mi piel. Caricias de esas que relajan pulsaciones. De las que hacen olvidar problemas.  Y es que por aquel entonces hasta parecía fácil vivir esta vida, siempre que fuera con él. Y es que sabía exactamente donde tocarme, donde besarme... para que me hiciera sentir mejor.  Me gustaba sentarme en silencio y oír los latidos de su corazón. Me gustaba hablarle del mundo, de la vida... sin que a veces escuchara una sola palabra mientras me besaba. Solíamos pensar que nuestro amor no acabaría nunca. Solíamos pensar que sólo sería un  paréntesis.  Pero amor, que raro se me está haciendo este paréntesis, que duro, que difícil de llevar. Y que largo..cuanto va a durar? Porque mi corazón se va apagando poco a poco c